La técnico de la Dirección de Alcaldía cobró 4.000 euros netos en diciembre. Sueldos Públicos agradece la colaboración de Barcelona en Comú

El Portal de Transparencia de Barcelona rectifica: Guerrero sí tiene el sueldo limitado a 2.000 euros netos al mes

Tatiana Guerrero Muñoz trabaja en el Ayuntamiento de Barcelona. No es funcionaria. Su puesto de técnico de la Dirección de Alcaldía es un cargo de confianza.


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Ante los datos confusos del Portal de Transparencia del Ayuntamiento de Barcelona que, desde hace algunas semanas, sí informa de que Guerrero tiene el salario limitado y las aportaciones del concejal Badia sobre su relación sentimental, Sueldos Públicos tiene la intención de llamar al Consistorio de la Ciudad Condal para aclarar todos aquellos datos que se alejen de la realidad.


Nos basamos, siempre que podemos, en datos oficiales o fuentes documentales secundarias. El error es siempre una posibilidad y daremos la difusión oportuna para dejar constancia de los datos correctos que aparecen en este artículo. Somos los primeros interesados en ofrecerlos.


Tatiana Guerrero Muñoz trabaja en el Ayuntamiento de Barcelona. No es funcionaria. Su puesto de técnico de la Dirección de Alcaldía es un cargo de confianza. También se les llama de libre designación o remoción. También es consellera técnica del distrito de Les Corts.


Sueldos Públicos ha llamado a la responsable de Prensa de Barcelona en Comú por segunda vez y nos ha atendido amablemente.


En efecto, Tatiana Guerrero sí tiene el sueldo limitado como el resto de compañeros que ocupan un cargo de confianza. Se le aplica el código ético de la formación y su sueldo es de 14 pagas anuales de 2.000 euros netos. La polémica surgió porque cuando redactamos esta noticia, en la casilla de Guerrero no figuraba el indicativo con la letra (i) que señala la limitación de su salario. 


Puedes comprobarlo en estas dos capturas de pantalla y también en este enlace con los salarios de los eventuales.



Captura Pantalla Guerrero

En esta captura de pantalla Guerrero no tiene la indicación del sueldo limitado.


Pantallazo Guerrero sueldo limitado

En esta captura de pantalla, si aparece la indicación y el desplegable con la aplicación del código ético.


Por otro lado, según las propias aclaraciones del concejal Eloy Badia, aunque son asuntos personales, Guerrero y Badia no están casados, aunque convivan o tengan una relación sentimental.  


Para que quede claro, Guerrero, con un sueldo asignado de 50.790 euros brutos anuales cobró 4.000 euros netos en diciembre y Badia, 4.400. Rectificamos la información que afirmaba que Guerrero no tenía la retribución limitada y cobraba 3.628 euros brutos al mes y en diciembre, más de 7.000.


Coloquialmente, los cargos de confianza son los nombrados ‘a dedo’ y finalizan su contrato cuando el que los nombró, un alcalde, un ministro, un consejero autonómico, entre otros, cesa. Son puestos necesarios para formar equipos competentes, de la máxima confianza del político para llevar a cabo las políticas públicas que benefician a los ciudadanos además de para evitar filtraciones y tener al enemigo dentro de casa. A pesar de estas precauciones, una gran parte de los casos de corrupción en España se conocen gracias a estas personas o a sus allegados.


En Sueldos Públicos hemos hablado de este asunto en otras ocasiones porque los partidos políticos utilizan con frecuencia estos puestos como premio de consolación para los miembros del partido que no han salido elegidos en las listas electorales, pese a su escasa formación, o para colocar a parientes y amigos de concejales y diputados. Es parte del cáncer que padece la democracia en nuestro país.


Y ¿por qué hacemos noticia de Guerrero? Pues para poner, de nuevo, encima de la mesa las prácticas de nepotismo que, aunque ya conocidas desde hace algunos meses, se vienen produciendo desde la Ciudad Condal. Si al inicio del mandato de la alcaldesa Ada Colau nos enteramos de que había puesto con un sueldo público a su novio, aunque le paga el partido, y en Madrid, Manuela Carmena había hecho algo parecido con otros parientes, resulta que Guerrero es la pareja sentimental del concejal de Presidencia, Territorio, Agua y Energía, Eloi Badia, responsable del distrito de Gràcia. Ha estado en la picota por la gestión que hizo de los disturbios del Banc Expropiat (Banco Expropiado) y es una persona de la máxima confianza de Colau. Por cierto, Ciudadanos denunció hasta cinco casos de concejales cuyas parejas tenían intereses en el consistorio.


Eloi-Badia Sueldos Públicos


Badia tiene una retribución asignada de 84.532 euros brutos anuales, pero este concejal de Barcelona en Comú, también tiene el salario limitado a 14 pagas de 2.200 euros netos al mes. Es ingeniero industrial y acumula una ristra de cargos representativos que puedes consultar en este enlace. Parte de su experiencia profesional se basa en proyectos de cooperación en el extranjero.


El currículum de Guerrero


Guerrero nació en 1988 y tiene estudios universitarios. Es licenciada en Psicología y Máster en Políticas Públicas y Mediación Comunitaria. Según el currículum, que puedes consultar en la web del consistorio barcelonés y que está actualizado con fecha de julio de 2015, “ha participado en proyectos de cooperación en Uruguay, Argentina, Brasil y Marruecos”. Es un perfil similar al de su pareja en este aspecto. Afirma que “desde hace más de ocho años trabaja con población en riesgo de exclusión social, especializada en diversidad funcional, trabajadoras del sexo, adicciones y población sin techo. Desde hace más de cuatro años es miembro y portavoz de movimientos sociales en la lucha por el acceso universal a la vivienda, el agua y la energía. En el mundo académico he puesto un pie en proyectos democratización y participación de los órganos de gobierno de las universidades catalanas”. Pero no dice el nombre de esas universidades.


Tatiana Guerrero Sueldos Públicos


En este documento no hay referencia alguna a trabajos en la empresa privada, no sabemos si ha trabajado en organizaciones no gubernamentales con una retribución reglada, no menciona nombres, ni los cargos que ha ocupado. No sabemos si ha cotizado a la Seguridad Social con los datos que aporta. No sabemos si su primer trabajo con contrato es el del Ayuntamiento de Barcelona. No sabemos qué significa con claridad eso de “en el mundo académico he puesto un pie en proyectos de democratización…” ¿Poner un pie es trabajar? No sabemos si ha redactado un informe por ello, ha presentado un trabajo y ha cobrado por esa tarea. Su currículum sigue siendo poco transparente. Lo básico en este tipo de documentos es poner año, nombre de empresa y cargo desempeñado.


En abril de este año, el diario El Mundo informaba de que Colau estaba usando una treta legal -un decreto- que le permitía otorgar 35 puestos directivos a personas que no eran funcionarios. Entre los nombres que se publicaron estaba el de Tatiana Guerrero. El decreto se firmó el 20 de noviembre del 2015. “Hacemos porras entre los funcionarios sobre quién va a ganar (la plaza) y acertamos”, reconocía un empleado público. La mayoría de los perfiles escogidos estaban en la órbita de Barcelona en Comú. Pero la norma es clara. La selección de estos cargos directivos se realiza mediante concursos abiertos a los que se puede presentar cualquier ciudadano que posea estudios universitarios y cuente con una experiencia de tres años en cargos directivos. Guerrero cumple el primer requisito. El segundo, según su currículum, no.


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Imagen: elcritic.cat y Ayuntamiento de Barcelona.