Los sueldos públicos del personal de la Casa Blanca oscilan entre 50.800 y 195.300 euros brutos anuales

Anexo G: Trump crea un nuevo grupo de trabajadores federales para "cubrir puestos no profesionales" que promocionen sus políticas

"Mejorará la eficiencia y la rendición de cuentas del gobierno y mejorará los servicios prestados a los contribuyentes"


|

El presidente Donald J. Trump firmó este jueves una Orden Ejecutiva que establece una nueva clasificación de trabajadores federales, denominada "Anexo G", diseñada para cubrir puestos no profesionales orientados específicamente a la formulación e implementación de políticas de la Administración. Esta medida busca, según la Casa Blanca, mejorar la eficiencia gubernamental y asegurar una aplicación más fiel de la agenda presidencial. 


La Orden Ejecutiva modifica la Regla VI del Servicio Civil, creando la clasificación "Anexo G" para empleados que se dedican a tareas de "formulación o promoción de políticas". A diferencia de los empleados de carrera, los ocupantes de puestos del Anexo G serán de naturaleza no profesional, lo que implica que, en principio, se espera que dejen sus cargos al finalizar la administración que los nombró. El equivalente en España al personal de libre designación: asesores, asistentes o eventuales de ministros, consejeros autonómicos o de concejales. Si cesa el político que te nombró tú también te vas a la calle. La Casa Blanca ha aclarado que esta nueva categoría no afectará a los puestos ni a los empleados de carrera ya existentes.


Trump

Trump, en la Casa Blanca (Archivo. Michael Kappeler. DPA Pool).


La Administración Trump argumenta en un comunicado que la creación de estos puestos del Anexo G aborda un vacío en las clasificaciones de empleados federales, permitiendo una mayor capacidad de las agencias para implementar las políticas de la Administración. "El presidente Trump cree que la creación de puestos no profesionales del Anexo G mejorará la eficiencia y la rendición de cuentas del gobierno y mejorará los servicios prestados a los contribuyentes", señala la web oficial, que no hace referencia alguna al rango salarial que podrían percibir estos empleados.


La justificación de la medida se apoya en la premisa de que algunos puestos federales, dada su naturaleza confidencial o su rol en la determinación y promoción de políticas, deberían estar exentos de las protecciones de los empleados de carrera, las cuales, según el gobierno, "dificultan la destitución de trabajadores corruptos o de bajo rendimiento". Se menciona que las categorías de contratación existentes, como el Anexo C y el Anexo Política/Carrera (creado en abril por el propio presidente para empleados de carrera en funciones de política), no cubrían adecuadamente estas funciones no profesionales de política.


La implementación del Anexo G busca "facilitar el nombramiento de empleados federales no profesionales que prestarán servicios temporalmente e implementarán la agenda política establecida por el pueblo estadounidense mediante nuestras elecciones". Se espera que esto optimice las operaciones, especialmente en agencias como el Departamento de Asuntos de Veteranos, al agilizar los nombramientos para roles clave en políticas públicas.


Reforma de la Burocracia 

La Administración enmarca esta Orden Ejecutiva dentro de los esfuerzos del presidente Trump para "desmantelar el estado profundo y recuperar nuestro gobierno de la corrupción de Washington". Además de la creación del Anexo G, se recuerda la previa creación de la categoría "Política de programación/Carrera" en abril, con el objetivo de mejorar la rendición de cuentas de los empleados federales de carrera en funciones relacionadas con políticas.


El gobierno ha manifestado que el presidente Trump busca reducir las ineficiencias burocráticas "garantizando que las agencias federales prioricen la voluntad del pueblo estadounidense por sobre sus intereses arraigados". Esta iniciativa se suma a otras acciones de la Administración para revisar y eliminar regulaciones innecesarias, con el fin de lograr un gobierno "más receptivo y efectivo".


Salarios de la Casa Blanca

En un acto de transparencia, la administración del presidente republicano, Donald Trump, dio a conocer el pasado 2 de julio el detalle sobre los sueldos públicos de los miembros del personal de la Casa Blanca. El documento y del que se hicieron decenas de medios busca satisfacer la curiosidad ciudadana respecto a los ingresos salariales de los funcionarios públicos, revelando que las ganancias de los empleados oscilan entre los 59.070 dólares anuales como mínimo y 225.700 dólares como máximo (entre 50.800 y 195.300 euros anuales antes de impuestos). Según Fox News, algunos funcionarios optan por no aceptar salario alguno por su servicio al país, una práctica que también se refleja en el informe. En 2017 nos hicimos eco de los sueldos públicos de los asesores de la Casa Blanca. Entonces, la Administración Trump tenía a 22 empleados con una retrbución que superaba los 180.000 dólares anuales.


Así, se identifica a Jacalynne Klopp, asesora principal de la Casa Blanca, como la empleada mejor pagada, con un salario anual de 225.700 dólares. Le sigue de cerca el asesor asociado Edgar Mkrtchian, quien percibe un ingreso de 203.645 dólares.


Un grupo significativo de 33 empleados se sitúa en el siguiente nivel salarial, con un sueldo de 195.200 dólares. Entre ellos se encuentran figuras conocidas de la administración, como la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, y el responsable de la frontera, Tom Homan. En esta misma categoría salarial también figuran la jefa de Gabinete, Susan Wiles; el asesor comercial, Peter Navarro; el director de comunicaciones, Steven Cheung; y el jefe de gabinete de la policía y asesor de seguridad nacional, Stephen Miller, según ha reseñado Fox News.


El documento también desglosa otras franjas salariales. Los redactores de discursos del presidente Trump, por ejemplo, perciben entre 92.500 y 121.500 dólares anuales. Adicionalmente, hay 108 empleados que reciben un sueldo que oscila entre los 59.000 y 80.000 dólares.


La nómina presidencial incluye a ocho empleados que no perciben ningún ingreso salarial por sus funciones en la Casa Blanca. Algunos de estos se desempeñan en funciones superpuestas en otras secciones del gobierno. Este es el caso del secretario de Estado, Marco Rubio, quien no recibe remuneración por su rol como asesor de seguridad nacional en la Casa Blanca. De manera similar, el enviado especial Steve Witkoff es remunerado por el Departamento de Estado.


Aunque el informe no detalla los honorarios específicos que percibe el presidente Trump, Fox News recordó que el esquema salarial del presidente de Estados Unidos está establecido por ley federal. Como presidente, Donald Trump percibe un salario base de 400.000 dólares, además de una asignación de 50.000 dólares para gastos, 100.000 dólares para viajes y 19.000 dólares para entretenimiento. Durante su primer mandato, el presidente Trump donó su salario a agencias gubernamentales y ha manifestado su intención de seguir esta práctica en su segundo periodo.