Pedimos a Melchor, Gaspar y Baltasar una tabla retributiva de salarios según la responsabilidad a nivel estatal y evitar disparates, entre otras cosas

​La carta de Sueldos Públicos a los Reyes Magos

Queremos que el Gobierno de España mejore la Ley de Transparencia y la arbitrariedad a la hora de no responder a las solicitudes de información


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La llegada de los Reyes Magos de Oriente marca el fin de las festividades navideñas en nuestro país. Además, también supone la celebración de las tradicionales cabalgatas donde los ayuntamientos tiran la casa por la ventana (no todos). La más antigua es la de Alcoy, que desde 2001 es Fiesta de Interés Turístico Nacional.


Aunque sean los más pequeños los que disfruten en mayor medida, no hay límite de edad para acoger estas fechas con ilusión y, sobre todo, ver cumplidos los deseos en forma de ‘regalo’. Por eso, desde Sueldos Públicos hemos querido escribir la típica carta a ‘Sus Majestades’ con el propósito de mejorar los criterios a la hora de asignar la retribución de los políticos, los parámetros de transparencia, y la rendición de cuentas, entre otros asuntos.


Reyes Magos

Los Reyes Magos (Inteligencia Artificial).


Queridos Reyes Magos, si por algo se caracteriza nuestra clase política es por los sueldos públicos que reciben y que proceden del erario. En muchas ocasiones (no siempre), se fijan retribuciones disparatadas en relación con el puesto que ocupan y deseamos que esto se evite en la mayor medida posible. Estas situaciones son más llamativas en localidades medianas y en empresas públicas. Precisamente este año, tras las elecciones del 28 de mayo, nuevos alcaldes llegaban al poder y se asignaban una nueva remuneración. En Jalance (Valencia), un pueblo de unos 788 habitantes, José Carlos Poveda cobra, con el bastón de mando, un salario de 34.848 euros brutos anuales, como contamos en este digital. Otro ejemplo es del Ayuntamiento de Rubí, de 77.000 habitantes, y que, en 2021, su alcaldesa contaba con un sueldo de 74.100 euros.


Es decir, casi como el sueldo de un ministro de hace tres años. También pasa en la Administración General del Estado con directores de Gabinete, de organismos o secretarios de Estado, entre otros, que superan los 100.000 euros anuales de retribución. El de los asesores ni siquiera se detalla. Además, con esto también se destaca que el presidente del Gobierno, 90.010 euros de sueldo, y sus ministros, 79.415 euros, parece que cobren ‘poco’ para la responsabilidad política que tienen respecto a otros altos cargos. Sería conveniente que sus salarios se correspondan con su responsabilidad y que los puestos inferiores en el ministerio no cobren más que él, que es lo que ocurre actualmente.


En estos casos, también se aplica a las dietas que se perciben por asistencia a órganos colegiados o que no hubiera partidas exentas de tributación. Esto último se puede ver en instituciones como el Congreso de los Diputados o el Senado, más de 2.000 euros libres de impuestos y que, por tanto, no aportan nada al Estado. La famosa ‘indemnización’. Consideramos que es evitable en el sentido en el que los ciudadanos de a pie no tienen esa posibilidad.


Queremos pedir una escala, tabla o pirámide de sueldos públicos en función del nivel de responsabilidad de cada cargo, donde en la cúspide esté el Jefe del Estado. No es nada disparatado, ya que Alberto Núñez Feijóo, presidente del PP, propuso un Plan de Calidad Institucional cuando era candidato a la presidencia del Gobierno. Entre las medidas que planteó, figuraban los distintos rangos de retribuciones para el Ejecutivo central y el resto de las administraciones. Algo similar a lo que ocurre con los funcionarios.


Mejorar en transparencia, otro deseo

En 2013 se aprobó la Ley de Transparencia, Acceso a la Información y Buen Gobierno pero aún tiene deficiencias y ahora el reto mayor es crear una nueva o reformar la existente. De hecho, sigue en el cajón el reglamento de desarrollo de la norma. Desde este digital, pedimos a sus Majestades que la transparencia y el buen gobierno sean los ejes que muevan la política para generar confianza con los ciudadanos.


En este sentido, pedimos que se trabaje en los portales de transparencia para ofrecer una imagen clara y abierta y que la solicitud de información no caiga con tanta frecuencia en saco roto. Por ejemplo, en este digital solemos hablar del complemento de productividad, que es tan famoso como opaco y no sabemos nunca la cifra concreta que se otorga por él, solo a través de los cálculos propios que se puedan hacer. 


Sería necesario, al igual que se hace con la retribución completa del cargo, detallar las cantidades que lo componen y también la información sobre los criterios que se siguen para concederlo. Recientemente, salió el nombre de Ernesto José Gasco por su nuevo nombramiento, el mismo que en 2022 recibió más de 41.000 euros por el complemento concedido por Pedro Sánchez. De él también se desprende otro ejemplo, el nepotismo que existe en las designaciones de los altos cargos en empresas públicas, la mayoría ‘a dedo’, al igual que el personal eventual, con escasa información sobre su formación académica. También pedimos que los Portales estén actualizados, con información completa y veraz y que no estén vacíos de contenido.


La Casa Real también debe trabajar en transparencia, especialmente con el complemento retributivo al rendimiento que “percibe el personal que presta servicio en la Casa con la finalidad de retribuir el rendimiento, dedicación o iniciativa con que desempeñen sus funciones”, según su página web oficial. En el presupuesto de 2023 de la institución, esta partida supuso 2’6 millones de euros de gasto. La cantidad que percibe cada uno de los altos cargos por este motivo, no se publica con detalle, solo sus retribuciones globales