Tres en seis años. David Cameron y Theresa May ocuparon antes el número 10 de Downing Street en Londres. El principal escollo era cómo salir airoso de las negociaciones del Brexit. Pero las cosas podían ir peor. Una pandemia y otra guerra en Europa lo han complicado más si cabe. Boris Johnson ha dimitido este jueves como primer ministro del Reino Unido. Se estaba quedando sin apoyos en sus propias filas. Las fiestas ilegales durante los meses más duros del confinamiento, las mentiras y las dimisiones internas lo han acorralado. Lo vimos pasear en solitario la semana pasada por algunas galerías del Museo del Prado, durante la cumbre de la OTAN. Ahora tendrá más tiempo para acabar de ver el resto de la pinacoteca, si lo desea, y volver a su actividad en el ámbito privado, como columnista, en algún rotativo británico, cuya remuneración antes de asumir el cargo era muy jugosa.

Johnson asumió el cargo a finales de julio de 2019 y un año después tuvo que afrontar los costes de un divorcio no demasiado barato. En septiembre de 2020 se quejó amargamente y The Times afirmaba que tenía que afrontar muchos gastos por la separación y el mantenimiento de cuatro de los seis hijos que ha reconocido oficialmente. Johnson ganaba mucho más como un simple miembro del Parlamento.

En este sentido, el líder de los conservadores tenía mayores ingresos cuando su actividad como parlamentario era compatible con trabajos en la empresa privada. Algo parecido le pasó a Mariano Rajoy a finales de 2011, cuando se convirtió en presidente del Gobierno y dejó de cobrar hasta 200.000 euros brutos anuales como presidente del PP. Era un sueldo incompatible con el cargo.

Según la prensa británica, Johnson pasó de ingresar más de 350.000 libras esterlinas al año (unos 414.000 euros al cambio actual) mientras era diputado y escribía una columna en el periódico Daily Telegraph, ofrecía conferencias y discursos a cobrar “solo” 150.000 libras al año. Hace tres años Sueldos Públicos se hico eco de la retribución de Johnson como alcalde y el salario base de los parlamentarios británicos desde 2001 hasta 2008.

Incluso las quejas ya se arrastraban desde 2017 cuando era ministro de relaciones Exteriores y sus 140.000 libras anuales de sueldo no eran suficientes para salir adelante debido a sus “extensas responsabilidades familiares”. The Times también destacaba que él y su prometida entonces, la periodista Carrie Symonds, estaban preocupados por no poder pagar una niñera. “No tiene ama de llaves, tiene una sola persona que hace la limpieza”, según un amigo del primer ministro. Otro testimonio cercano indicaba que Johnson “siempre está preocupado por el dinero, tiene una necesidad genuina de mantener a su familia, y creo que eso le preocupa”.

Parlamentario y primer ministro

Las cifras de su salario ‘bailan’ un poco según la fuente. Así, en febrero de este año, el portal Forbes publicaba que Johnson percibía un salario de unos 180.000 euros anuales. En cambio, el portal Tusalario.es, que cita fuentes de medios británicos y también páginas oficiales, desglosa que Johnson cobra como miembro del Parlamento y otro sueldo como primer ministro. Así, en abril de 2022, el salario básico anual como diputado era de 84.144 libras y 79.936 libras como líder del ejecutivo. En total 164.080 libras, el equivalente a casi 194.000 euros anuales.

El 14 de septiembre de 2010, cuando era alcalde de Londres, The Guardian publicó un artículo en el que se explicaba que Johnson se había enfrentado a peticiones para que se disculpara por su comentario “fuera de lugar” de que sus ingresos de 250.000 libras (296.000 euros al cambio actual) por escribir una columna semanal en el Telegraph eran “alimento para pollos”.

Otro apunte más. Según publicó Mirrow en noviembre de 2019, Johnson incumplió las reglas sobre intereses financieros tres veces en menos de un año. Por un lado, se saltó el Código Ministerial en agosto de 2018 al comenzar una columna en un periódico por la que percibía 275.000 libras anuales solo tres días después de renunciar como secretario de Relaciones Exteriores. Incluso se le solicitó que se disculpara por no declarar a tiempo 52.723 libras de ingresos. Y en abril de 2019 se retrasó 11 meses en registrar su participación del 20% en una propiedad en Somerset.

El mismo rotativo daba cuenta hace tres años de que Johnson ganó más de 700.000 libras (828.000 euros) además de su retribución como diputado durante el año posterior a su renuncia como secretario de Asuntos Exteriores. En esa cifra se incluyen las citadas 275.000 libras anuales del Daily Telegrapf  y 400.000 libras en discursos. En esta última cantidad cabe computar 42.580 libras por un solo discurso que defendía un Brexit sin acuerdo. “Obviamente es posible ganar más dinero al no ser un político de tiempo completo”, señaló Johnson.