Se cumplen siete meses del nombramiento de Carles Fabró al mando del Palau de Pedralbes

​El responsable de reimpulsar la segunda sede de la Presidencia de la Generalitat de Cataluña en Barcelona cobra más de 77.600 euros brutos al año

Hasta febrero era el jefe de Gabinete de Relaciones Externas y Protocolo


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Hace apenas tres días, el 11 de septiembre, Día Nacional en Cataluña, se cumplieron siete meses del nombramiento de Carles Fabró como responsable del Palau de Pedralbes en Barcelona. Hasta el 10 de febrero era el jefe de Relaciones Externas y Protocolo desde los años ochenta, cuando Jordi Pujol era ‘molt honorable’ president de la Generalitat de Cataluña. El Govern que dirige Pere Aragonès decidió encargar a Fabró el reimpulso de este palacio para convertirlo “en un espacio con mayor uso institucional y abierto a la ciudadanía, en el que se llevarán a cabo actividades de la Presidencia y de todos los Departamentos”, según explicaron en un comunicado.


Palau Reial Pedralbes (Barcelona)

Vista parcial del Palacio de Pedralbes (Wikipedia).


Una de las tareas prioritarias de Fabró será actualizar el equipamiento del inmueble y situarlo como segunda sede de la Presidencia y del Govern en la Ciudad Condal para eventos de carácter representativo y centro de relación institucional del gobierno autonómico. Su nombramiento se produjo después de la cesión gratuita de dominio y libre de cargas y gravámenes por parte del Ayuntamiento de Barcelona que dirige Ada Colau de la finca donde está situado el palacio y sus jardines.


4.600 euros brutos menos

El sueldo público de Fabró pasó de la noche a la mañana de los 82.249 euros brutos anuales que cobraba como jefe de Relaciones Externas y Protocolo de la Conselleria de Presidencia de la Generalitat a los 77.628 euros como responsable del Palacio de Pedralbes. Son unos 4.600 euros menos en caso de que conserve el cargo durante un año completo. Fabró, por lo tanto, sigue teniendo una retribución que supera la asignada a los ministros del Gobierno de España, 76.355 euros. Gana más que algunos presidentes autonómicos.


Este reimpulso coincidió con la reforma del Salón de Sant Jordi del Palau de la Generalitat, donde se celebran numerosos actos institucionales. Y, mientras duren las obras, el Palacio de Pedralbes está acogiendo buena parte de estos actos.


Protocolo desde 2000

Carles Fabró i Ràfols nació en El Prat de Llobregat en 1961. Es diplomado en Ciencias Empresariales por la Universidad de Barcelona. Ha sido director del Gabinete de Relaciones Externas y Protocolo de la Generalitat desde el año 2000. Ha trabajado con los últimos siete presidentes autonómicos: Jordi Pujol, Pasqual Maragall, José Montilla, Artur Mas, Carles Puigdemont, Quim Torra y Pere Aragonès.


A carles fabró


Entre sus funciones como director del Gabinete de Relaciones Externas y Protocolo destacan la organización y programación de las relaciones externas y los actos públicos de la Presidencia de la Generalitat y la coordinación de las funciones de protocolo de todos los departamentos.


Actualmente, la directora de Gabinete de Relaciones Externas y Protocolo es Anna Teixidó, hasta ahora adjunta a esta misma oficina. Cobra 82.249 anuales. Teixidó fue directora del Gabinete de Relaciones Externas y Protocolo del Departamento de la Vicepresidencia y de Economía y Hacienda de la Generalitat de Cataluña, con Oriol Junqueras y Pere Aragonès. Es licenciada en Sociología por la Universidad de Barcelona (2007) y coordinadora (2015-2022) del Máster en Protocolo, Relaciones Institucionales y Organización Estratégica de Eventos, de Blanquerna – Universidad Ramon Llull.


Residencia de la Familia Real

El Palacio de Pedralbes fue residencia de la Familia Real Española entre 1919 y 1931 en sus visitas a la ciudad. Actualmente el Palacio alberga el Museo de Cerámica y el Museo de Artes Decorativas. Según el portal Barcelona.com, el Palacio tiene su origen en la antigua masía de Can Feliu, del siglo XVII. La finca fue adquirida en 1862 por el conde Eusebi Güell, junto con la vecina Can Cuyàs de la Riera.


Al proclamarse la República en 1931, pasó de nuevo a ser propiedad del consistorio, que decidió instalar el Museo de Artes Decorativas, inaugurado en 1932. Durante la dictadura del General Francisco Franco volvió a ser residencia del jefe del Estado. En 1990 se instaló el Museo de Cerámica. Como curiosidad, el 4 de octubre de 1997 se usaron sus instalaciones para el almuerzo y recepción con motivo de la boda de la Infanta Cristina con Don Iñaki Urdangarín.