Eduard Pellicer trabaja a tiempo parcial en el área de Juventud, Transparencia y Nuevas Tecnologías

El concejal de Esquerra Republicana de Cambrils que insultó a los maños también cobra de la empresa de aguas

Eduard Pellicer Sabaté es concejal de Esquerra Republicana de Catalunya en Cambrils a tiempo parcial y cobra un sueldo público desde junio de 2015. Además, es autónomo.


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Eduard Pellicer Sabaté es concejal de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) en Cambrils a tiempo parcial y cobra un sueldo público desde junio de 2015. Además, es autónomo. El municipio costero de la provincia de Tarragona tiene unos 32.800 habitantes censados, pero en temporada alta recibe a miles turistas de varios puntos de Europa y España y otros tantos veraneantes propietarios de segundas residencias de origen aragonés, como es habitual en el litoral sur de Tarragona y norte de Castellón.


Pellicer, que es tercer teniente de alcalde y portavoz de su grupo, ha sido noticia estos días porque en Semana Santa publicó en su muro de Facebook un comentario que borró a las pocas horas tras comprobar que estaba fuera de lugar, incitaba al odio, era malo para la economía de la localidad, para su partido y para el propio consistorio. “Pumas bienvenidos a #Cambrils”. La palabra “pumas” se refiere a “putos maños” en referencia a la cantidad de visitantes de Zaragoza (no todos los aragoneses son maños) que recibe la ciudad durante las vacaciones de Semana Santa, puentes festivos y verano. Pellicer rectificó: “He borrado la publicación porque me he dado cuenta que he utilizado una expresión inadecuada. Pido disculpas a todo el mundo que se haya podido sentir ofendido”, explicó en la red social.


Los mensajes desafortunados en las redes sociales por parte de cargos públicos electos o personas con responsabilidad institucional provocan malestar, insultos, decepciones y hasta peticiones de dimisión. Aunque se borren al poco tiempo o se pidan disculpas, durante horas y días, incluso semanas, el implicado es carnaza de todo tipo de comentarios despectivos, bromas, memes y chascarrillos que pueden hundir la moral o la carrera de una persona con carácter débil o que no está preparada para un aluvión de críticas salvajes. Es el pueblo el que se la devuelve con la misma moneda.


Este tipo de crisis reputacional, que hace 15 o 20 años se atajaba de otra manera porque no se estaba tan expuesto, provoca toques de atención del partido político implicado, reuniones de urgencia, más trabajo para el jefe de Prensa, comunicados de última hora o revisión de contenidos en otras redes. Además, se recurre cada vez más a la hemeroteca para contrastar cómo actuaron otras formaciones en situaciones similares y si es viable esquivar los dardos de la misma manera y salir airoso. Ya se sabe que no se hace y se dice lo mismo cuando uno está en la oposición que cuando uno asume una cartera ministerial, una consejería, una concejalía o es diputado del partido que gobierna. 


En todo caso, el ciudadano apunta con ironía, sarcasmo, ingenio, mala leche, se cabrea y maldice la desgracia de tener que aguantar a un sujeto político concreto al que todos le pagamos un sueldo público y debe ser el primero que dé ejemplo a la hora de representar a todos, no solo a los votantes de su partido.  

14 pagas de 2.250 euros

Pellicer percibe un sueldo público de 31.500 euros brutos al año por una dedicación a tiempo parcial. Son 14 pagas de 2.250 euros. En junio y diciembre, con la paga extra, sus ingresos se duplican hasta los 5.500 euros brutos. Por su parte, la alcaldesa María del Camino Mercedes Mendoza cobra 51.300 euros anuales. Hay otros concejales a tiempo completo que ingresan 41.400 euros. En total, hay siete tenientes de alcalde. Los ediles de la oposición perciben dietas de asistencia por valor de 11.970 euros, según el Portal de Transparencia del Ayuntamiento de Cambrils. Hay que tener en cuenta que los cargos electos de ERC están olbigados a donar entre el tres y el 14% de su sueldo al partido.


Pellicer también es presidente de Comaigua, la empresa pública que gestiona el suministro del agua en Cambrils y en otras poblaciones vecinas. Cobra dietas de asistencia como miembro de la Comisión Ejecutiva. Son 10 reuniones anuales. Cada sesión se paga con 355 euros. En la primera versión de la noticia habíamos omitido este dato y un lector nos ha avisado. No obstante, debemos consultar al Ayuntamiento si también cobra por otro tipo de cargos según la tabla retributiva publicada en el Portal de Transparencia. El concejal cobraría, por lo tanto, 2.250 euros al mes más 355 euros. No son dos sueldos públicos, porque en España la ley lo impide, pero sí son dos ingresos públicos.


Respecto de los cargos de confianza, la jefa de Gabinete de la alcaldesa del Ayuntamiento de Cambrils cobra 34.949 euros al año. El director del Museo de Historia y la directora del Patronato de Turismo también perciben esa cantidad por una dedicación de 37,5 horas semanales. 


Por otra parte, sorprende que los datos insertados en las declaraciones de bienes y rentas de todos los concejales menos uno, de noviembre de 2015 y febrero de 2017, sean idénticas, hasta los decimales de sus ahorros y cuentas corrientes. Eso demuestra una cosa: no se han enriquecido con su trabajo como concejales en 15 meses. Pero deja bien a las claras las trampas y limitaciones de los Portales de Transparencia. ¿Quién vigila al que vigila? ¿Quién fiscaliza que la información pública que facilitan nuestros políticos es real, es la correcta, está actualizada y no contiene errores? 


Todos los miembros de la corporación excepto el concejal del Grupo Municipal de la Asamblea de Cambrils, Iván Sanz Benito, reconocen disponer del mismo saldo medio de depósitos bancarios en noviembre de 2015 y luego en febrero de 2017, según las fechas que aparecen en los documentos del Portal de Transparencia. Sanz declaró 18.151 euros en dos cuentas bancarias de La Caixa en 2015 y 15 meses después su saldo medio menguó a 6.723 euros. 


¿Es el único concejal que dice la verdad, que ha hecho los “deberes” de transparencia? ¿Cómo es posible que el resto de concejales tenga el mismo saldo medio en sus cuentas bancarias tras 15 meses y que haya cinco que lo dejen en blanco las dos veces? ¿De qué sirve el documento de la declaración de bienes y rentas si nadie comprueba que se corresponde con la verdad? Es más, hasta cinco concejales, una del PSC, una de Ciudadanos, dos de Nou Moviment per Cambrils (NMC) y uno de la antigua Convergència i Unió, ahora PDeCAT, dejan en blanco la casilla del saldo medio de sus depósitos. Sueldos Públicos ha llamado este viernes a Alcaldía para pedir explicaciones sobre este asunto y ha intentado dejar constancia escrita mediante el formulario de la página web, pero tras varios intentos erróneos hemos desistido.


Pellicer declara 700 euros en Caixa Agraria y en Catalunya Caixa 12.124 euros, 21.500 en activos financieros y un "Plans A" de 5.036 euros. Las mismas cifras, 15 meses después.

Apuntes biográficos

Pellicer nació en Cambrils el 2 de diciembre de 1981. Tiene 36 años. Actualmente es autónomo y desarrolla tareas de consultoría y docencia para una empresa forestal. Es ingeniero forestal, especializado en industrias forestales por la Universidad de Lleida. También posee un máster en Formación del Profesorado de Secundaria Obligatoria y Bachillerato, Formación Profesional y Enseñanza de Idiomas por la Universidad Rovira i Virgili de Tarragona. Tragsa entre 2007 y 2012 y en otras compañías forestales y del sector de la construcción.


El perfil de Pellicer no encaja con el prototipo de cargo electo que procede de las secciones juveniles de los partidos políticos como te ha informado este digital en otras ocasiones. Y el ejemplo de Roger Torrent, del mismo partido, es muy claro. El actual president del Parlament de Cataluña empezó como concejal en su pueblo con 20 años.


Tiene formación y un trabajo que no ha querido abandonar pese a ejercer un cargo público. Milita en ERC desde 2014 y es miembro de la ejecutiva local. También es miembro de varias asociaciones culturales y festivas del municipio.


Imagen: Foto de archivo cedida al Diari de Tarragona.